23/9/09

Por los pelos.


Guti, Guti, Guti; m... ¡No! ¡Guti no es maricón! Es metrosexual. Y no nos hemos de reír de él por ello porque, hoy en día, todos los hombres lo somos un poco. No maricones, sino metrosexuales. Y sino metrosexuales, al menos centímetrosexuales. Pero no hablemos de medidas que ahí la mayoría salimos perdiendo. Yo soy un ejemplo. No por el tema de las medidas, sino por lo de la metrosexualidad. Y es que afeitarse alguna parte del cuerpo es algo que todo varón ha probado alguna vez, como lo de intentar llegarse.

Concretamente yo opté por afeitarme las axilas. En realidad fue una novia la que me obligó. Ahora es ya una ex. ¡Después del sufrimiento que me hizo pasar! De acuerdo que yo le puse los cuernos con su hermana, pero ella me había forzado a depilarme el sobaco. ¡Eso sí que es hacer sufrir a alguien! Me dijo: “¡Quítate esos pelos! ¡Que quedan muy feos!”. Yo respondí con firmeza: “¡Eso es de mariquitas!”. Ella me respondió con una firmeza mayor: “O te depilas o te tendrás que hacer mariquita de verdad para poder volver a mojar”.

Lo hice. A mi manera, sin ceder a más peticiones: “¡Háztelo con cera!”.Yo ni caso. Maquinilla. Resultado: Una semana sin poder bajar los brazos. ¡Cómo pinchaba! Parecía que estaba a punto de intentar asustar a alguien.



Michael y Josmar también se afeitan la sobaca con maquinilla.


Ya me dijeron que había dos métodos para depilarse: El rápido o el bien hecho. Lógicamente, soy más de ir por la vía rápida. En cambio mi novia lo prefiere bien hecho. Estaba hablando de depilación, aunque la situación es aplicable a otros campos.


Las técnicas de depilación han avanzado. Ahora existe una tercera vía: La depilación láser...

Luke, soy tu esteticién y voy a depilarte el lado oscuro...


Se ve que la fotodepilación consiste en quemarte parte de la piel, impidiendo que crezca el vello. Que también vaya paradoja que el pelo de las orejas, los pelos del culo o los pelos de la nariz se llamen “vello”. Más que vello es algo horroroso. Como horroroso era Freddy Krueger... de pequeño. ¡Una de granos! Suerte que pasó por una clínica de tratamiento láser. “Esto ya está”. “¡Esto no está! ¡No está ni la piel! ¡Me habéis desgraciado la cara!”. “Pero ya no tienes granos”. “Ni cara”. “Cara sí es. Son 1200 euros”.


Ya lo dice el refrán: “Para presumir hay que sufrir”...



1 comentari:

Josep ha dit...

Jo sempre he presumit molt de pèl al pit.

I pensar que no té cap mèrit! En canvi, anar depilat és molt dur, i fa mal.